Cuando estás embarazada, tu cuerpo te brinda algunas señales iniciales de tu estado: mareos, náuseas, cansancio extremo y sueño, pero no lo hace de inmediato, ni siquiera a los 7 días tras la fecundación, puesto que el óvulo fertilizado por el espermatozoide apenas mide una doceava parte de un grano de arroz (6 milímetros mide el cereal).

Esos dos milímetros de tu óvulo no generan un gran impacto en tu cuerpo, así que a la semana de tu embarazo no tendrás una señal clara de que estás embarazada, a menos de que te hayas sometido a un tratamiento de fertilización y que tengas contados —con alta precisión— los días después de que te implantaron un óvulo fecundado.

Por eso, los mareos, las náuseas, el cansancio y el sueño llegan “tarde”, dos o tres semanas después de la fertilización de tu óvulo.

¿Dónde está mi regla?

Otra señal de embarazo es para muchas, la ausencia de la regla. Pero, en algunas chicas el periodo menstrual no es tan regular y a veces suelen menstruar un mes sí y otros no. Ello ocurre, especialmente en mujeres jóvenes que apenas comienzan con su periodo, o que usan anticonceptivos hormonales (como la píldora) de forma irregular, por ejemplo, pues se les olvidan tomarlo o no lo la ingieren porque no tienen dinero para comprarla mes a mes.

Así que es la ausencia de la regla la primera señal de embarazo, pero si eres irregular puedes estar confundida y no saber si estás o no embarazada y cuánto tiempo tienes. Además, cuando el óvulo fecundado se implante en el útero, suele haber un pequeño sangrado, que muchas veces en confundido con la regla.

Por eso, lo ideal es que te hagas una prueba casera de embarazo de alta sensibilidad, estos productos miden el nivel de una hormona llamada hCG, la cual libera la placenta.

La mayoría de las marcas de pruebas caseras miden la presencia o no de la hCG, pero otras marcas precisan su cantidad, entre más alto estén los niveles de hCG más semanas tienes de embarazo. Sin embargo, el cuerpo femenino también puede producir la hCG aún sin un embarazo. Por ejemplo, en algunos tipos de cáncer puedes tener aumentada esta hormona.

Además, la hormona hCG solo se podrá medir a los 14 días de la implantación del óvulo. Es decir, un tema es la fecundación (el espermatozoide entra en el óvulo) y luego el óvulo se implanta en tu útero para dar paso a la placenta (este órgano no se forma enseguida, sino, en promedio, a la tercera semana de la fecundación hasta que logra implantarse el óvulo).

Si no sabes si estás o no embarazada, checa los números de la hormona hCG del siguiente cuadro:

Embarazos inferiores a 3 semanas: menor que 5 mUI/ml.

Embarazos de 3 semanas: entre 5 y 50 mUI/ml.

Embarazos de 4 semanas: entre 5 y 426 mUI/ml.

Embarazos de 5 semanas: entre 18 y 7.340 mUI/ml.

Embarazos de 6 semanas: entre 1.080 y 56.500 mUI/ml.

Embarazos entre 7 y 8 semanas: entre 7.650 y 229.000 mUI/ml.

Embarazos entre 9 y 12 semanas: entre 25.700 y 288.000 mUI/ml.

Embarazos entre 13 y 16 semanas: entre 13.300 y 254.000 mUI/ml.

Embarazos entre 17 y 24 semanas: entre 4.060 y 165.400 mUI/ml.

Embarazos entre 25 y 40 semanas: entre 3.640 y 117.000 mUI/ml.

Es complicado saber tan pronto

Una semana no es exactamente el mejor tiempo para saber si estas o no embarazada. Por eso, ante la primera señal o ausencia de la regla, acude de inmediato con el médico, especialmente si no deseas ser madre.

Pero para que no “andes con el Jesús en la boca” lo mejor es colocarte un método anticonceptivo antes de comenzar tu vida sexual activa, puesto que si en tu planes está el no ser mamá, no te arriesgues y disfruta tu vida sexual sin miedo al embarazo no deseado.

También usa un condón para que puedas evitar enfermarte, pues un embarazo no deseado se puede resolver con una ILE (si es decisión de la mujer), pero el VIH no, ese aún no tiene cura.

Por Guadalupe Camacho, @Lupichick, periodista y académica mexicana

Recommended Posts