Mencionar la palabra viagra es hacer referencia a una pastilla azul que erecta el pene con el fin de que se mantenga firme para hacer posible la penetración. Así que las mujeres no necesitamos como tal una pastilla de este tipo, incluso si una mujer se toma una pastilla para la disfunción eréctil (hay tres tipos distintos de ellas) no le servirá porque el clítoris no funciona igual que el pene.
Sí, el clítoris se erecta cuando está excitado o estimulado, pero no penetra. Incluso, el clítoris puede generarte más de un orgasmo (algunas mujeres hacen mención de 5, 10 o hasta 20) en una sesión de sexo. Si el clítoris es estimulado correctamente puede darte orgasmo tras orgasmo. Además, el clítoris es mucho más grande que lo que se observa directamente, tiene ramificaciones internas que permiten un estruendo de placer femenino.
Por eso es un tanto machista pensar en un viagra femenino, en lo que sí podemos pensar es en productos y medicamentos para incrementar el placer de la mujer en la cama, en el sofá o en la ducha, donde quiera que busques tener sexo.
¿Cómo actúan los productos para incrementar el placer sexual femenino? Funcionan de dos maneras: local y cerebralmente. Los primeros trabajan localmente porque muchas mujeres se quejan de dolor, malestar o incomodidad al tener sexo, a pesar de que ellas sienten el deseo. Así que se han elaborado una serie de productos para evitar esas molestias durante los juegos sexuales o la penetración.
También hay productos que actúan de forma cerebral, porque las mujeres con disfunción sexual mencionan que no tienen “deseos”, “pensamientos” o “ganas” de tener sexo, entonces habría que utilizar medicamentos que incrementen sustancias cerebrales para producir pensamientos de deseo sexual.
Los productos que actúan localmente están conformados por una serie de aceites, cremas, lubricantes y óvulos que colocas en tu vulva o vagina. Por ejemplo, hay aceites de calor, que si te los untas sobre el clítoris comenzarán a incrementar su temperatura, tendrás una picazón suave e inquietante, su objetivo es poner en tu mente el clítoris para que lo estimules más fácilmente.
También hay lubricantes que funcionan con aromas y esencias que permiten una mejor penetración, también los puedes usar sobre tu clítoris y estimularlo más fácilmente. Hay óvulos que contienen hormonas para preparar la vagina a fin de que sea penetrada sin dolor, puesto que puede estar reseca, especialmente en mujeres que ya están en la menopausia, incluso, son usados por mujeres que tuvieron algún acto violento sexual, para cuidar su vagina.
Respecto de los productos que funcionan cerebralmente, son medicamentos que incrementan ciertas sustancias cerebrales, que al paso de varios meses de toma (son pastillas), pueden ayudar a tener una nivelación entre el deseo y la necesidad de tener sexo.
Estos productos son fármacos para la depresión y ansiedad, que se ha visto tienen un mediano impacto en la salud sexual femenina. Como todos los medicamentos tienen efectos secundarios, por eso deberán ser prescritos por médicos reconocidos tras una evaluación psiquiátrica certera.
Creo que el mejor producto para incrementar el deseo sexual femenino es la educación sexual, plena, consciente y efectiva, en la que se aborde anticoncepción, autoerotismo, noviazgo, deseo sexual, amor y metas futuras.
Una mujer informada y educada, podrá ejercer su sexualidad más fácilmente sin miedos ni prejuicios.
Por Guadalupe Camacho, periodista y académica mexicana