Las preferencias sexuales y los fetiches son un universo completo en el que hay algo (con su respectivo mercado) para cada uno. Estas prácticas pueden parecer extravagantes y dejan claro que lo que a unos les resulta excitante, a otros les da asco o simplemente les da igual, pero en lo que se refiere al sexo «normal», resulta curioso que las quejas de las mujeres respecto a los errores que cometen los «güeyes» en la cama se parecen: dudas en medio del acto, sexo anal sin permiso —de verdad tienen que dejar de hacerlo, ¿nadie les platicó sobre la importancia del consenso?— falta de sexo oral y eyaculación precoz son algunas de las quejas más recurrentes. Pero por supuesto, hay más. Aquí hicimos una lista de declaraciones que gritan BASTA, por favor.
No olviden que para todas sus prácticas sexuales deben usar condón para evitar el contagio de una ITS y un método anticonceptivo de largo plazo para evitar un embarazo no deseado, y por supuesto, debe haber mucha comunicación para evitar que sucedan cosas así.
Yuriko, 27 años. Que no hagan sexo oral pero que sí quieran que se los hagas. A casi todas mis parejas sexuales he tenido que pedirles que bajaran e hicieran sexo oral. Muchos lo hacían más a huevo que por ganas, pero sí querían que yo bajara y me quedara largo rato ahí, cuando una también se cansa, no es un gesto taaan agradable tener la boca abierta y que te follen como si fueras muñeca inflable.
Lorena, 21. La presión por tener sexo anal. En serio, ¿por qué les gusta?.
Denisse, 24 años. Que se vengan rápido y que sólo piensen en su satisfacción. Salía con un «dude» al que le encantaba coger conmigo, a mí me daba hueva, pero el cuerpo tiene necesidades. Un día que le estábamos poniendo en su casa, juro que duró menos de 10 minutos; yo apenas estaba empezando a concentrarme, ni orgasmo tuve, pero lo vi tan cansado y sudoroso que le dije que sí me había venido, porque ya tenía hambre y me quería ir.
Verónica, 18. No me gusta que quieran tener acción luego, luego; así sin un besito, ni nada…
Dani, 23. Odio que pregunten «¿Soy el mejor?» o «¿Soy el más grande?». No entiendo por qué les importa tanto. Digo, si vamos a coger es por algo, ¿no? ¿Qué se supone que debo responder? ¿La verdad? «No, mira, mi ex la tenía más grande y lo hacía mucho más rudo pero, pues, tú no estás tan mal». Obvio no. Te obligan a mentir para alimentar su ego y lo peor es que muchos sí se lo creen. Creo que no hay nada mejor que un hombre que demuestra seguridad. Si eres el mejor, créeme, la chica te lo va a decir.
Ruth, 28 años. Odio que una pareja comience a preguntar en medio de la acción «¿Te gusta cómo lo hago?», «¿Dices mi nombre?» O cosas así. Me parece de una absoluta inseguridad y sí me baja todas las ganas de un jalón.
Xiomara, 27 años*. Que intenten sexo anal sin previo consentimiento. Me pasó una vez, el muchacho ni avisó, estábamos en plano acto, de perrito, y sin más lo metió ahí, me dolió, le dije que no, me levanté enojada y me acuerdo que me fui al baño. Después nos echamos unas caguamas y le dije cómo estaba el asunto, que no era de Dios pues.
Lourdes, 42 años. Una de las cosas que más me desagrada que un chico haga en la cama es que tome mi cabeza y la empuje, como «sugerencia» para el sexo oral. Si se presenta un amante con una actitud como esta, puedo detenerme en el momento y dejarlo a la mitad del asunto.
Mar, 26. Que no quieran ponerse condón. No hay nada que me parezca más grave y de peor gusto que eso. Estás fajando y primero tienes que pedirle que se ponga condón porque ya se la sacó y no parece estar planeando hacerlo. Pero lo cabrón es cuando encima se niegan porque «no se van a venir adentro ni tienen nada» y empiezan a hacer berrinche en actitud seductora. ¿Es en serio, chavos? ¿Ustedes son inmunes a las ITS?, ¿cómo le vas a creer a alguien que no quiere usar condón la primera vez que se ven y cogen, que no tiene nada? Es muy alarmante, he notado que mayoría de los hombres heterosexuales mexicanos le tienen fobia al condón.
Raquel, 30 años. Odio que me dejen vestida. Empiezo a imaginar que no le gusta mi cuerpo o que sólo soy un agujero y ya valió. No hay forma de que llegue al orgasmo.
Sofía, 19 años. No me gusta que se vengan y se duerman, o que estén bien inspirados en una posición y de repente le bajen el volumen. Sientes que se te va la vida. O que estén de perrito, se les salga y entonces se acerque a tu hermoso ano y lo metan poquito, es como un mini infarto.
Alejandra, 33 años. Que se crean Christian Grey y pierdan toda proporción de sus capacidades, no sólo porque evidentemente NO son Christian Grey, sino porque además pueden ser demasiado toscos o bruscos y si lo hacen sin preguntar y nosotras no estamos en el mismo mood en lugar de convertirnos en Anastasia Steele, nos convertiremos en Lorena Bobbitt.
Pamela, 26 años. Aunque he oído que tener los pies calientes favorece a que el orgasmo sea más duradero y placentero, odio que el güey se deje los calcetines puestos. NO LO SOPORTO.
Con información de VICE